Visitamos el municipio de Balboa por la agudización del conflicto armado. Carlos Estrella, coordinador de emergencias de nuestra organización en Colombia, nos cuenta cómo la situación se ha deteriorado.
En lo que va de 2021, más de 21.000 personas han sido desplazadas en el triángulo de Telembí huyendo del conflicto armado. Desde Médicos Sin Fronteras (MSF), nos preocupa su falta de acceso a los servicios más básicos y pedimos una mayor respuesta humanitaria en elementos de albergue, agua limpia, higiene y alimentación.
El recrudecimiento del conflicto armado en el departamento de Nariño está generando graves consecuencias humanitarias para miles de personas. Compartimos un relato de nuestra intervención en un desplazamiento de más de 220 familias en el municipio de Olaya Herrera.
Días después de que el Huracán Iota destruyera la isla de Providencia, un equipo de Médicos Sin Fronteras viajó al lugar para atender a las personas más vulnerables. Este es el panorama que se observa casi un mes después de la tragedia.
Entre el abandono estatal y la presión de los actores armados, cientos de personas en las zonas costeras de Nariño permanecen aisladas y enfrentando por su cuenta los impactos de una nueva ola de violencia.
Luego de apoyar las respuestas de las instituciones locales a la pandemia de COVID-19 en Colombia, nuestros equipos en Norte de Santander y Nariño han intervenido luego de varios eventos de violencia que han afectado el bienestar físico y emocional de la población civil.
Para millones de víctimas de una emergencia humanitaria, el impacto psicológico puede ser grave. Brindamos atención médica y en salud mental para ayudar a curar sus heridas invisibles.